La obra «Solsticio de Verano» representa los tiempos de abundancia y fertilidad de la tierra, donde se alargan los días de sol, llegan los frutos, maduran los cereales. Es el momento de relajación del ser humano. Esta obra se desarrolla de forma vertical donde la dualidad tanto en la luna como en el sol son el eje principal de la obra. Dando la importancia de cómo influyen estos elementos en el tiempo de nuestra vida y como esta se forma a través de los masculino y femenino.
Proyecto financiado por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.